Por Miguel Recio
Con esto de la Ley 44-00, que nunca se ha puesto en práctica, pero que se saca a relucir justo ahora, con el objetivo de tapar una situación social que al parecer está a punto de ahogar al sistema que por *mala práctica política* está afectando a la población seria y trabajadora.
La delincuencia común, la corrupción e impunidad existente, así como la escalada de precios en la canasta básica por efecto de una inflación real, aquella que ataca a los bolsillos de los ciudadanos día a día y totalmente diferente a la de los números fríos que se publican en una prensa mutilada y manipulada a base de prebendas jugosas y compras de conciencias (bocinas), muy a pesar del festejado “crecimiento” que sin BIENESTAR ECONÓMICO se está manifestando crudamente, desmantelando todo el sistema clientelar y populista que se ha instaurado en los últimos 20 años.
A falta de razones lógicas y racionales para establecer ciertas convenciones sociales, se utiliza lo religioso para establecer lo correcto de lo incorrecto, buscando apaciguar a los incautos.